El masaje kobido proviene de la medicina tradicional japonesa en combinación con otras técnicas del masaje tradicional japonés que se han ido desarrollando a lo largo de los años.
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Está basado en 48 técnicas diferentes que conectan movimientos rápidos y lentos, pero sobre todo es vibracional. Este masaje va mucho más allá de la técnica, ya que la persona que ofrece kobido ha de ser creativa y gentil, permitiendo que el cuerpo entre en un estado energético idóneo.
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Es arte interno, como interpretar una pieza de música donde el rostro de la persona se convierte en un instrumento.
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Me dedico a hacer kobido porque me apasiona y creo que sólo así se pueden obtener los mejores resultados.
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Algunos beneficios del masaje kobido: aumenta la circulación sanguínea, elimina bacterias y toxinas, regula la hidratación de la piel, libera las contracturas del tejido muscular, mejora la actividad glandular, relaja los nervios, aporta oxígeno y nutrientes a las células, activa el sistema linfático, reduce arrugas y la flaccidez de la piel...
Está especialmente indicado en casos de migrañas, bruxismo, estrés, afecciones o patologías del cuello, nuca, cara, ojos y cuero cabelludo.
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Las zonas donde se aplica el masaje son: la cara y la cabeza en general, las vértebras cervicales, el cuello, los hombros y la parte superior del pecho.
El kobido también es llamado lifting facial natural por sus resultados a nivel estético sin necesidad de cirugía.
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Experimenta el arte del kobido!
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